Con pequeños cambios en tus hábitos podrás conseguir grandes resultados
Si te estás planteando una forma de vida más sostenible pero no sabes cómo empezar, te dejamos unos consejos para reducir tu impacto en el medio ambiente.
Hay muchos pequeños gestos y hábitos que pueden ayudar a reducir considerablemente el impacto de tú día a día en el medio ambiente, sin que apenas lo notes:
- Lava la ropa cuando realmente sea necesario
A menudo lavamos la ropa sin que esté sucia, simplemente por haberla utilizado una o dos veces “porque toca”. Pero, ¿realmente necesitas lavar una prenda sin signos de suciedad? Si la prenda no tiene mal olor o manchas visibles, probablemente puedas utilizarla de nuevo. Antes de echar la ropa al cesto de la ropa sucia, pregúntate si realmente es necesario. En cada hogar se ponen alrededor de 400 prendas por año, eso se traduce en 60.000 litros de agua. ¿Te imaginas conseguir reducirlo aunque sea a la mitad?
- Evita la secadora y la plancha siempre que puedas
Secar la ropa al aire no gasta ni un solo recurso y además ahorrarás dinero. Si puedes tender tu ropa y esperar a que se seque al aire, estarás reduciendo muchísimo las emisiones de CO2 y dañarás menos tu ropa. Lo mismo ocurre con la plancha, y es que hay muchas prendas que no es necesario planchar.
- Carga la lavadora por completo y utiliza agua fría
Es importante no poner lavadora en vano, ya que es un gran gasto en agua y energía. Por eso trata de llenarlas al máximo, seguro que puedes esperar un par de días más y así llenarla por completo. Si puedes evitar utilizar agua caliente, ¡genial! Ya que los lavados en frío consumen un 90% menos que los lavados en agua caliente. Cada lavado libera alrededor de 700.000 fibras de plásticos microscópicos, es momento de echar una mano al medio ambiente.
- Compra y vende de segunda mano
La ropa que ya no usas puede darte unos ingresos extra y además encontrar una segunda vida en el armario de otra persona. De esta forma el ciclo de vida de la prenda volverá a comenzar desde cero y evitarás la fabricación de una nueva prenda. Lo mismo ocurre cuando compras de segunda mano: no hay prenda más sostenible que aquella que ya existe. Además encontrarás prendas geniales a muy buen precio.
- Dona o recicla la ropa que no es apta para el uso
Lo importante es darle otro uso a las prendas y evitar que vayan a la basura. Por lo que si no están en condiciones de venderlas de segunda mano, los contenedores de donaciones y reciclaje de ropa son buenas opciones para que encuentren una nueva vida.
- Intercambia ropa con tus amigas
Si puedes contar con la ropa de tus amigas, tendrás un armario enorme y no tendrás que comprar prendas nuevas cada dos por tres. Podéis intercambiar lo que tenéis en vuestros armarios cada vez que queráis un outfit diferente, así alargaréis mucho más el uso de la ropa.
- Arregla tu ropa
Acostumbradas al fast fashion, es bastante habitual desechar una prenda cuando tiene algún desperfecto mínimo. Sin embargo, esas prendas casi siempre se pueden salvar de una forma sencilla. Aprender a coser y reparar la ropa, además de ahorrar en recursos será muy satisfactorio para ti.
Como ves, cambiando pequeñas cosas podrás ayudar al planeta de una forma bastante significativa. Ya que si mantienes estas costumbres a lo largo de los años, la cantidad de recursos ahorrados será enorme.
Blaugab dice
¡Gran post! La industria de la moda es responsable del 20% del desperdicio de agua y del 8% de los gases de efecto invernadero… Ahora es más importante que nunca acudir a tiendas de moda ecológica y sostenible. Cuida tu piel y tu planeta.