Hay prendas que necesitas tener siempre, la camisa blanca es una de ellas, sácale partido y crea outfits ideales
Un vestido mini negro, unos pantalones pitillos, una chaqueta ‘denim’, una camisa blanca… ¿qué tienen todas estas prendas en común? Muy sencillo, son los básicos que debe tener cualquier armario. Con ellas podemos jugar e integrarlas en looks muy distintos para múltiples ocasiones.
De hecho, uno de los ‘must’ de la temporada es la camisa blanca, aparte de haber sido siempre una prenda imprescindible, está muy a la moda actualmente. A continuación, vamos a enseñarte la versatilidad de la camisa blanca y lo mucho que puede llegar a enriquecer tus futuros looks.
Cómo llevar una camisa blanca en invierno y verano
¿No sabes para qué ocasiones puedes ponerte esta prenda? Póntela para trabajar, salir con tus amigas, para cenar, para ir de fiesta, para una comida familiar… Y durante todo el año. Puedes darle el toque que tu quieras y experimentar tanto con ella que te vale para prácticamente cualquier ocasión, por eso tienes que tener siempre una mano.
Puedes optar por la típica camisa blanca normal, una larga, con mangas anchas, sin cuello, con más o menos escote… Hay muchos tipos de camisas blancas, decide cuál o cuáles van más con tu estilo, o crees que vas a sacarle más partido, y empieza crear tus looks.
Look camisa blanca oversize
La primera combinación que te vamos a mostrar es una de las que más se lleva desde hace ya unos años, el oversize en las camisas está muy de moda. Puedes ponerte tu camisa blanca oversize para un plan de día con unos vaqueros anchos o pitillo, lo que más te guste.
Si quieres convertirlo en un look de noche con camisa blanca para ir a cenar o salir de fiesta ponte un pillo negro de efecto piel y unos tacones, ¡quedará increíble! Puedes llevar esta camisa tal cual o añadirle un cinturón ancho para marcar la cintura. Es una prenda que crea un outfit muy chic y muy cómodo al mismo tiempo.
El más clásico
Si tienes un estilo formal o simplemente te apetece llevar un outfit más clásico, éste es el tuyo. Coge una camisa blanca normal de manga larga y póntela con una chaqueta de punto marrón o negra, o una blazer de estos colores también, le dará el toque formal que buscas.
Le puedes añadir unos pitillos vaqueros o negros, y en cuanto al calzado, unos botines sería lo ideal para completar el look, pero si prefieres comodidad, con unas sneakers blancas irás también ideal. Finaliza tu outfit con unas gafas chic y un bolso elegante.
La camisa-vestido blanca
Uno de los look que más se lleva con camisa blanca es el de llevarla como si fuera un vestido. Lo que necesitas es una camisa oversize, como la que te hemos dicho arriba, y que te llegue a la altura que te llegaría un vestido mini, más o menos. Así, la podrás llevar como un vestido.
Además, este es de los outfits más versátiles. Si quieres hacer un plan de noche, ponte una blazer o una chaqueta de fiesta y unos botines o zapatos de tacón. En cambio, si lo quieres llevar más casual, ponte una blazer, una chaqueta de cuero o una denim, con unas botas planas o unas zapatillas blancas.
Look camisa blanca corta
Puedes tener también la versión corta de la camisa blanca tipo crop top y combinarla de distintas maneras, dependiendo de la ocasión. Esta prenda estiliza mucho, marca la cintura y estira la silueta.
¿Plan de noche? Ponte una camisa blanca con una falda midi bonita y unos tacones, llevarás un look diferente y muy chic. ¿Plan de día? Combínala con unos vaqueros ‘mom’ o unos pitillos básicos te irá genial, añádele unas zapatillas con plataforma o unos botines que tengan rollo.
El look camisa blanca más alternativo
Si eres de las atrevidas que se pone todo para experimentar, te traemos un look para ti. Como hemos dicho, la camisa blanca es una prenda tan versátil que nos permite crear outfits totalmente opuestos con una misma camisa.
En este caso, le vamos a añadir a la camisa, ya sea oversize, normal o corta, unos pantalones del estilo ciclista y unas zapatillas llamativas y anchas, aunque también podemos ponernos unos botines blancos o negros. Puedes llevar la camisa normal, o como una sobrecamisa con un top llamativo debajo. ¿Te apuntas?
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